Comenzar bien la semana
«Lunes, nos encontramos de nuevo. Nunca seremos amigos pero tal vez podamos superar nuestra enemistad mutua hacia una asociación más positiva»
Julio-Alexi Genao
Es un lugar común pensar que el día más aborrecible para mucha gente es el lunes como primer día de la semana e inicio de esa cuesta que lleva entre situaciones estresantes hasta el siguiente fin de semana. Aunque esta percepción queda parcialmente desmentida por los resultados de una encuesta realizada por Gallup hace unos años, y que no encontró diferencias significativas de cómo se percibía el lunes en comparación con los tres siguientes días de la semana.
Si somos de los que no le vemos ninguna gracia a ese día, no aporta nada el quejarse de su existencia, de los madrugones, de los trabajos a realizar, de las reuniones que mantener, de los jefes insoportables, de tener que abandonar la comodidad del ocio……, esos pensamientos negativos sólo consumen energía sin aportar ningún valor añadido.
Si se afronta de manera adecuada, el lunes puede ser un día especialmente provechoso que ayude a enfocar el resto de la semana con positividad y energía. Algunos de los aspectos a tener en cuenta para ello son, desde mi punto de vista, los siguientes:
- Identifica qué aspecto del lunes te amarga e intenta buscarle una solución
- Planifica lo que haya que hacer el viernes anterior. Identifica las tareas a realizar, prioriza y asigna entre los diferentes días de la semana. Una semana bien organizada se contempla de otra manera cuando se inicia
- Escoge una meta principal para la semana y ve realizando el análisis de su cumplimiento
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No comiences la semana estresado. Levántate con tiempo y
desayuna con calma
- Afronta la semana con optimismo. Si pensamos que va a ser estupenda es más fácil que sea así («profecía autocumplida»)
- Intenta llegar algo antes al trabajo para poder relacionarte con los compañeros y avanzar en paz sobre los temas pendientes, antes de que comience la vorágine diaria
- Realiza una tarea sencilla para comenzar el día con resultados positivos
- Tómate descansos a lo largo del día para desconectar y relajarte
- No revises el correo hasta mediodía. De esa manera, el lunes será mucho más productivo
- Programa para los lunes alguna cosa que te gratifique especialmente, como quedar con los amigos, y que ayude a que lo esperes con especial ilusión
Creo que dejar de considerar a los lunes como un infierno está en nuestras manos, y todo depende de cómo lo afrontemos. Y probablemente, la actitud que se refleja en el chiste del gran Forges no sea la más adecuada para ello.