Management visto por otros ojos 0/6. Planteamiento
Estamos acostumbrados a ver los temas con y por los ojos de las personas que son expertas en esa materia o que han aportado, a través de sus comportamientos y resultados, valor a la cuestión concreta. Está muy bien. Así hemos aprendido y aplicado esos conocimientos a nuestros entornos personales o profesionales.
Pero también podemos ver esos temas a través de la mirada de otras personas que no tengan nada que ver y que de manera indirecta o muy lejana hayan dicho o hecho cosas que podamos relacionar y terminar aplicando. Este planteamiento solo es válido en el ámbito teórico y por supuesto no se nos ocurre llevarlo a la práctica, porque el resultado podríamos predecirlo de antemano.
En el caso del management o del pensamiento en torno al management parece que la teoría del “todo vale” podría considerarse, porque antes o después todo puede tener una aplicación en la gestión diaria de cualquier organización. Sin embargo, el “todo vale” no ha valido nunca. Por muy en abstracto que queramos plantear las cuestiones, no pasaría de ser un ejercicio meramente diletante.
Propongo jugar en este sentido y recoger las enseñanzas que nos han dejado personajes famosos más o menos aplicables a las reflexiones sobre el management. No se trata más que de un ejercicio intelectual que a la postre nos resulta práctico, sencillo y agradable.
En este sentido he elegido a cinco reconocidos autores, variopintos o algo disparatados. De la política clásica, a Winston Churchill; del mundo de la fantasía y la transformación, al cineasta Woody Allen. De la grandiosa época dorada de los felices años 20, a Coco Chanel; del sufrimiento, la superación y el ejemplo universal, a la birmana Suu Kyi; y del mundo de la comunicación, las masas o el populismo, a Jorge Valdano.
Es verdad que hace falta tener mucha fantasía y algo de locura para relacionar alguna frase más o menos conocida de estas personas con la ciencia o la técnica del management, pero superado este escollo resultará al menos interesante y pondremos cara y ojos a muchos dichos que con frecuencia repetimos y no sabíamos de dónde salen.
Como valor añadido a este planteamiento de las cinco próximas entradas, les propongo que vayan ustedes eligiendo sus frases favoritas, ya sea para apropiárselas (como hace mucha gente) o para repetirlas oportunamente. Un nuevo abanico de posibilidades.