¿Estas preparado para implementar un CRM?
¿Te han contado ya las mil maravillas que un CRM supondría para tu empresa? ¿Estas valorando implementar un sistema de Customer Relationship Management? ¡Piénsatelo otra vez!
Si eres de los que piensan que un CRM es una herramienta mágica que llega a tu empresa y lo convierte todo en oro, olvídate del tema y no pierdas tiempo y dinero. Pero si estas comprometido con tu negocio y luchas para mejorarlo día a día, sigue leyendo.
No te voy a decir que sistema elegir, ya que depende del tamaño de tu empresa, del presupuesto y además hay mucha información en la red para poder consultar y decidir de una forma informada. Hoy por hoy hay, soluciones en la nube que no suponen gastar una fortuna y que dan muy buenos resultados.
En cambio sí te voy a preguntar si estás preparado para aplicar la filosofía CRM en tu empresa. Como dije al principio, no se trata de hacer magia. Un CRM es una hoja en blanco que te ayuda recoger, construir, recordar y analizar la información de tu empresa y los resultados de tu negocio. Es un centro de mando, donde vas a tener que coger las riendas para asegurarte que todo va en la dirección adecuada.
La filosofía CRM requiere compromiso a largo plazo y a todos los niveles. Supone un trabajo extra y un esfuerzo de adaptación por parte de todos los implicados antes de empezar a ver los beneficios. Tus empleados son los elementos más importante de un sistema así, ya que sin ellos, la información no entra en las bases de datos y sin información no hay informes y sin informes estas dando palos de ciego.
¿Y como consigues que tu gente haga el esfuerzo necesario para hacer la bola rodar?
- Asegúrate de hacerles saber los objetivos de la empresa e implicarles en el cambio.
- Prepara un curso de formación continua para los empleados, para que pierdan el miedo a lo desconocido y que poco a poco asimilen el funcionamiento de la herramienta.
- Asegúrate de que tengan donde dirigir sus dudas con facilidad y rapidez.
- Valora a los que se emplean a fondo e informa a todos sobre los resultados conseguidos, para que sientan que forman parte del proyecto y lo hagan suyo.
Un CRM bien implementado es la memoria de tu empresa, un sistema de información centralizado en el que información valiosa para tu negocio no se pierde con los cambios de personal. El historial de tus clientes importa y hacerlo disponible para todos los departamentos ahorra tiempo y simplifica los procesos. Poder medir los resultados de tu negocio, disponer de estadísticas claras y poder dibujar tendencias en un abrir y cerrar de ojos es una auténtica maravilla.
Por tanto, si estás preparado para dar un paso más en la organización de tu empresa y además de adquirir una herramienta estas dispuesto a implementar cambios estructurales y una nueva forma de trabajar, no dudes más y elige el sistema CRM que más se ajuste a tu negocio.