Los Credit Default Swaps (CDS)
El CDS, en español, Permuta de Incumplimiento Crediticio, es un producto derivado crediticio. Los derivados de crédito son contratos financieros bilaterales, OverTheCounter (OTC), por los cuales una de las partes busca cubrirse del riesgo de crédito de un determinado instrumento.
Estos derivados se materializan mediante un contrato swap o de permuta financiera, sobre un préstamo o bono. El comprador de la permuta realiza una serie de pagos, los spread, y a cambio recibe de éste una indemnización en caso de impago. Es como una póliza de seguro, sin embargo, no hace falta que el comprador de la CDS haya incurrido en la compra real de deuda, este tipo de compra se denomina naked, y significa que estás apostando por el impago de la deuda.
Un ejemplo de cómo afectan una incorrecta gestión de este tipo de derivados es la crisis financiera de American International Group (AIG), que culminó con la nacionalización de la entidad aseguradora por parte de la Reserva Federal Americana. Esta crisis fue propiciada por la enorme exposición que tenía la entidad aseguradora al mercado hipotecario. Ahora paso a explicar qué comercializaba AIG y cómo entro en la crisis financiera.
Aquí es donde entran en escena AIG y los CDS’s. AIG vendía seguros de impago hipotecario, que para los inversores era un auténtico seguro contra el riesgo de impago, sin embargo también podían comprar los CDS’s especuladores para apostar contra productos financieros que no poseían recibiendo la misma indemnización que la gente que si poseía el activo financiero. Esto no planteaba un problema siempre y cuando las personas hipotecadas pagaran los préstamos o las viviendas siguieran revalorizándose.
Sin embargo, en 2008, los mercados empezaron a especular con que las viviendas estaban muy por encima de su valor real, a lo que se sumó que los hipotecados dejaron de responder a sus obligaciones, no pudiendo cumplir con las amortizaciones de los préstamos. Esto llevó a AIG a tener que hacer frente a pagos que no pudo realizar a aquellas personas que habían contratado los CDS’s, ya que no existía regulación para los CDS’s y AIG no estaba obligada a tener provisiones para hacer frente a los pagos.